lunes, 31 de marzo de 2025

Carlo Acutis





Carlo Acutis nació el 3 de mayo de 1991 en Londres (Reino Unido), donde sus padres, Andrea Acutis y Antonia Salzano, trabajaban. Tiempo después se trasladaron a Milán (Italia).


Siendo adolescente, Carlo fue diagnosticado con leucemia y decidió ofrecer sus sufrimientos por el Papa Benedicto XVI y por la Iglesia.


Desde temprana edad mostró un amor especial por Dios, incluso aunque sus padres no fueran especialmente devotos, incluso desde pequeño, el joven amaba rezar el Rosario.

 

Carlo Acutis estaba previsto para ser canonizado del 25 al 27 de abril de 2025; sin embargo, tras el cónclave de 2025 y la elección del Papa León XIV, su canonización se ha suspendido temporalmente. Con el inicio del pontificado del Papa León XIV, la Iglesia está reevaluando las causas en curso, incluida la de Carlo, antes de proceder con nuevas canonizaciones. Acutis, conocido por su profunda devoción a la fe católica y su hábil uso de la tecnología para compartir contenido religioso, se convertirá en el primer santo milenial. El Papa Francisco reconoció oficialmente un segundo milagro atribuido a Acutis y aprobó su canonización. Acutis, quien falleció en 2006 a los 15 años debido a una leucemia, ha sido admirado por su labor en la creación de un sitio web que documenta los milagros eucarísticos en todo el mundo.




Página web original de Carlo Acutis:





 Su beatificación tuvo lugar en octubre de 2020, y el reciente reconocimiento de un segundo milagro —un paso esencial en el proceso— marca la fase final hacia la santidad. Acutis es celebrado no sólo por su piedad sino también por su capacidad de integrar su fe con la tecnología moderna, resonando profundamente entre los jóvenes católicos de todo el mundo.




La vida de Carlo Acutis estuvo marcada no sólo por su fe y devoción ejemplares, sino también por sucesos milagrosos que se han atribuido a su intercesión después de su muerte. Un milagro notable asociado con Carlo involucra la curación inexplicable de un joven brasileño llamado Mattheus, que padecía un raro trastorno pancreático.

El estado de Mattheus era grave y los médicos habían agotado todas las opciones médicas. Su madre, una católica devota, recurrió a la oración y buscó la intercesión del Beato Carlo Acutis. Después de que ella oró fervientemente a Carlo por su intercesión, Mattheus experimentó una curación repentina y completa, para asombro de sus médicos.



Como dijo una vez el Beato Carlo: “Estoy feliz de morir porque viví mi vida sin perder ni un minuto en nada que desagrade a Dios”. Estas palabras resumen la esencia de la vida de Carlo: una vida vivida en completo abandono a la voluntad de Dios, donde cada momento estaba dedicado a glorificarlo.


A través de su vida y acciones ejemplares, el Beato Carlo Acutis nos desafía a examinar nuestras propias vidas y luchar por la santidad en todo lo que hacemos. Que su legado continúe inspirándonos a vivir vidas de virtud, devoción y servicio a los demás, mientras buscamos seguir a Cristo fielmente en los pasos de este santo de hoy en día. “La tristeza es mirarnos a nosotros mismos, la felicidad es mirar a Dios”, diría Carlo. “Lo único que tenemos que pedirle a Dios, en la oración, es el deseo de ser santos”.